poemas de noviembre 2016

Cerró los ojos para olvidar el olvido,
para dejar fuera un mundo cuya densa urdimbre se había vuelto incomprensible;
un mundo donde la lejanía de quienes fueron su razón de ser había hundido su luz
en la profunda sombra de la tristeza,
un mundo que, como el agua, resbalaba por sus dedos
dejándole entre las manos el insondable dolor de la soledad.

@Alfredo Vilchez.





Por un momento
la ciudad fue quimera,
como en un sueño.

Y el ocaso
cobijó a la luna
en su regazo.

@Alfredo Vilchez






En el transcurso lento de mis horas viejas
 busco palabras de luz que muestren nuevos horizontes, 
caminos de ilusión que den sentido a la existencia.

Pero en el mundo del hombre la luz es gris y la senda tortuosa, 
ajena al diario asombro ante la hierba que germina
en la arena húmeda por la tormenta, 
ante el agua de vida que surge de la entraña fecunda de la tierra, 
ante el impulso esencial que anima cuanto nace y crece.

Quisiera hablar del hombre, pero no puedo, porque su luz oscura le ciega,  
y sólo emplea, dispone, se sirve, explota y consume, 
olvidando siempre el alma de las cosas. 

No tengo voz para él, al menos hoy.
... Quizá mañana.
Ahora prefiero extasiarme con la danza de los árboles.

@Alfredo Vilchez



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